En una charla con el equipo de “Todo Pasa” de la 88,9, el Presidente Comunal de La Rancherita, Miguel Vanetti, compartió los logros y desafíos que enfrenta esta pequeña comunidad ubicada en el corazón del valle de Paravachasca. Desde sus primeras palabras, se percibe su arraigo y compromiso con este rincón que eligió como su hogar hace más de dos décadas. «Desde la primera vez que fui a La Rancherita, por allá por el 2000, quedé encantado y no volví más a la ciudad», confiesa Miguel, destacando el magnetismo que este lugar ejerce sobre quienes lo descubren.
El jefe comunal relata que el viernes pasado, La Rancherita celebró el lanzamiento del Plan Provincial de Forestación Nativa, dando inicio a la plantación de especies autóctonas con los primeros 110 ejemplares producidos en el vivero comunal. En esta tarea, los vecinos se suman con entusiasmo, contribuyendo al cuidado y mantenimiento del entorno natural que los rodea.
Pero el compromiso con el medio ambiente va más allá. Miguel comentó que la comunidad ha apostado fuertemente por la energía solar y está incursionando en la energía eólica, con el objetivo de ampliar su planta energética sostenible. Estas fuentes de energía limpia abastecen el sistema de alumbrado público del pueblo, brindando beneficios tanto económicos como ecológicos. “Tenemos un compromiso con el ambiente. Nos hemos sumado a la red argentina de municipios por el cambio climático, y con la comunidad regional estamos trabajando con otras localidades que ven esto como un cambio a futuro.”
En cuanto a la población, Vanetti nos informa que hoy La Rancherita cuenta con 300 habitantes, un número que se ha visto incrementado durante la pandemia, cuando muchas familias optaron por establecerse permanentemente en la zona. La comunidad ha podido gestionar este crecimiento demográfico y trabajar en la prevención de riesgos como los incendios forestales, manteniendo activas las campañas de concientización, lo cual Miguel vivió en primera persona por su paso por Defensa Civil de la comuna.
La Rancherita fue pionera y motivadora para que en la zona se declare una Reserva de Usos Múltiples, que hoy abarca 12.000 hectáreas. Miguel nos cuenta que “la diferencia entre la reserva natural es que la misma es en tierras públicas y habitualmente no habitadas, mientras que la reserva de usos múltiples está conformada por terrenos privados, públicos y centros levemente urbanizados”, por lo que requiere de algunas medidas de control y protección, más flexibles que en una reserva natural, y que se implementan para regular el turismo y evitar la sobreexplotación de recursos, garantizando la sostenibilidad a largo plazo. “Incluída en estas medidas de prevención está la nueva base de ETAC con aproximadamente 12 operativos, además de dos guardaparques estacionados en la reserva”.
En cuanto a los servicios básicos, el jefe comunal expresa que la comunidad enfrenta desafíos como el transporte público limitado, que no entra a la localidad, y la provisión de agua que depende de un único curso de agua. Sin embargo, se enorgullecen de contar con un dispensario de salud propio que brinda atención de calidad a sus vecinos. En materia de gestión de residuos, La Rancherita promueve la separación en origen, «aplicamos la política de separación en origen, o sea que nosotros les brindamos información e incluso bolsas de distintos colores para que hagan la separación, y los vecinos acompañan estas iniciativas”; aunque el presidente expresa su preocupación por los desafíos que enfrentan en el proceso de reciclaje, y planea abordar esta cuestión en futuras reuniones con otros jefes comunales de la región para promover acciones en conjunto. “Es una preocupación que tengo, porque estoy notando que hay un eslabón que falta cerrar, porque separamos la basura pero llega un momento en el que el costo para poder reciclar se eleva demasiado. Estamos hablando de armar reuniones con colegas para resolver esto.”
En esta búsqueda de mejoras en los servicios y reducir riesgos de incendios forestales, Vanetti informa que se realizó una licitación para cambiar una línea de media tensión, en este caso que pase por las calles y que sea más accesible para tareas de mantenimientos y emergencias, reemplazando una línea de difícil acceso como la que está en funcionamiento. En ese sentido, nos informa que en mayo comienza la obra para realizar ese cambio, para mejorar el servicio y poder proteger a la comunidad y sus animales de los riesgos que traía tener una línea tan obsoleta.
Ante el contexto económico nacional, Miguel muestra confianza en la capacidad de la comunidad para superar los desafíos. «No es la primera vez que los argentinos pasamos por una situación como esta, así que seguramente vamos a salir», reflexiona, destacando el compromiso de todos los habitantes con el bienestar común. “Nosotros tenemos muy pocos recursos, inclusive desde la parte contribuyente, porque somos pocos y son pocas las viviendas. La idea es que a esto le pongamos el hombro entre todos y lo saquemos adelante. Todo lo que esté a mi alcance, sobre todo con la reserva con la que me siento muy involucrado, yo lo voy a hacer.”
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