Los cocineros Julián Espinosa y Andrés Chaijale le dan vida año a año a Festival Peperina en Alta Gracia. La dupla gastronómica que se formó allá por el año 2002 está en el “detrás de escena” de un evento que se convirtió en referente no solo en nuestra provincia, sino también en distintas partes del país. En diálogo con Resumen, ambos cuentan de qué manera llegaron a este festival, su presente y la importancia de reivindicar los productos y valores locales año a año.
Andrés, ¿cómo ves el crecimiento que tuvo el festival?
Peperina es un evento que, gracias a Dios, la gente lo ha interpretado y apuestan por él; y como todo evento gastronómico va creciendo como fue creciendo del primero al segundo; y ahora del segundo al tercero, no va a ser la excepción.
¿Qué cambios hay?
Va a ser más grande en dimensión, hemos comido un poquito más del espacio del aire libre, y los grandes cambios son básicamente las inversiones que se han hecho en el Polideportivo en cuanto sonido, pantallas LED y la llegada de la gran tribuna. Ha crecido paulatinamente, la presencia de profesionales que nos van a acompañar desde Buenos Aires y el resto el país.
¿Cómo llegás a este evento?
Nosotros hace muchos años que nos dedicamos a la organización integral de eventos de este tipo; y tenemos a cargo un poco la coordinación entre las personas que vienen, las clases, la logística del armado del escenario; en fin todo el backup que hay que tener para sobrellevar estas clases en vivo; porque no nos olvidemos que las presentaciones son un poco un show y hay que tener todo preparadito como si fuera un programa de televisión.
¿Se siente más presión considerando que desde hace algún tiempo la cocina traspasó los límites de los chefs?
El público común, no el que se dedica profesionalmente a la cocina, ha encontrado quizás en los programas de televisión o en este tipo de eventos un hobbie, un cable a tierra, una descarga; entonces mucha gente cocina por pasión, para sus amigos, para la familia no con el solo hecho de alimentarse, sino con una visión recreativa. Estos eventos vienen un poco a poner al alcance de su mano la posibilidad de tomar clases con profesionales reconocidos, charlar con ellos y llevarse fotos, etc, bajarlos a tierra y ponerlos a disposición para que compartan con ellos este arte.
A pesar de la asesoría…seguís cocinando ¿no?
Seguimos cocinando, la cocina es la llama que nos mantiene vivos. Nosotros además de asesorar en eventos de este tipo asesoramos empresas gastronómicas en cambios y diseños de menús y estamos gerenciando varios locales gastronómicos en Córdoba.
Julián, ¿Cuando nace esta sociedad gastronómica con Andrés?
Vine a la Argentina el 6 de febrero del 2002, el primer recuerdo que tengo fue bajarme del avión, ver un descampado grande donde ahora funciona La Voz del Interior y el gordo Andrés que me recibía con locro con solo 32º de temperatura en Córdoba. Ahí nació la sociedad, trabajamos mucho tiempo juntos, después vimos que éramos docentes, extrañamos un poco lo que eran los fuegos y salimos a la cancha a cocinar en restaurantes, haciendo catering y comenzamos a andar de aquí para allá.
Hasta que explotó y hoy son los referentes en este ámbito…
Gracias por el cumplido, pero creo que solo somos tipos a los que les gusta cocinar y que nos gusta laburar.
¿Cómo llegan a Peperina?
Alta Gracia es festivalera, no gastronómicamente hablando porque no se hacían antes clases demostrativas,pero si son autores de un gran festival gastronómico como es Colectividades. Va a hacer tres años que comenzamos a trabajar con ésto en un predio con una expectativa muy humilde. El primer año vino solamente Sole Nardelli, nosotros también cocinamos en el escenario, y también nuestros colegas de Alta Gracia y siempre hubo una camaradería importante para impulsar Peperina. El segundo año creció y se trajo a Dolli, Osvaldo (Gross), la Sole (Nardelli), Martín (Molteni) y siguieron los chicos de Alta Gracia con un contenido más grande; en esta edición se incorpora a Narda Lepes y Juan Bracelli, el chef de Cocineros Argentinos.
¿ Este año se le da más lugar a las cosas asadas? Al aire libre?
En realidad queremos hacer cosas al aire libre que te permita meter carbón y algo de fuego.
¿Se escucha Peperina en otras partes del país? Considerando que ustedes visitan distintas provincias…
Estamos en boca de todos. El año pasado estuvimos en Masticar un grupo de los que trabajamos en Peperina como para ir viendo un poco y ver que tan lejos estamos. Eso es importante si uno se quiere medir. Y la verdad que para la localidad que tenemos y la Provincia que tenemos, no le pedimos nada a Masticar. Muchos referentes de la gastronomía cocinan allá y acá, gente que cocina rico,productos impresionantes, es eso nos da muchas ganas de seguir creciendo. En Masticar se habla de Peperina, y mucho.
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