Desde hace años, vecinos de Valle Buena Esperanza mantienen una fuerte discusión sobre la presencia de las canteras en el lugar. Las cuales, si bien para un grupo de vecinos significan una importante fuente de trabajo, para la mayoría su impacto es altamente negativo por la presencia constante (y a veces sin control) de camiones de gran porte que destruyen las calles; pero, sobre todo, por el daño ambiental y la contaminación sonora que produce la explotación de las mismas.
En este sentido, hace apenas una semana atrás la Justicia cordobesa ratificaba la prohibición a las empresas de explotar libremente en el lugar- algo que ya estaba decretado por ordenanzas municipales pero que una entidad minera había rechazado mediante recurso de amparo- aunque, el fallo sí dio lugar a la ampliación del horario permitido para esa tarea. Y, de esta manera, lo que antes podía hacerse sólo de lunes a viernes desde las 8 y hasta las 16 horas, ahora se permitirá que sea desde la hora 6 y hasta las 20 horas. Autorizando, además, a transitar los sábados medio dia.
Como era de esperarse, la noticia no cayó en gracia en los vecinos, quienes aseguran que la medida judicial retrasa y echa por tierra derechos ya adquiridos. Además, descreen de que el camino alternativo para la sobrecarga anunciado por el Intendente Marcos Torres, pueda realizarse sin perjudicar la fauna.
«Nos parece realmente una falta de respeto ya hasta una verguenza. Precisamente el dia viernes mientras en el Cañito Cultural se realizaba una conferencia por la problemática ambiental, el Intendente y el Asesor Letrado hablaban con su medio y confirmaban que el horario para el tránsito a las canteras iba a ser de 6 a 20 horas y que también se iba a poder hacer los sábados. Los vecinos luchamos mucho para que se logre la ordenanza que decía que antes de las 8 de la mañana estos camiones no podían trabajar y una empresa nunca lo respetó; hoy por ejemplo pasaron a las 6», explicó indignado un vecino del lugar, quien prefirió permanecer en el anonimato por temor a represalias.
«Nosotros entendemos que hay vecinos que trabajan y viven de esto, lo hemos hablado con ellos y bueno muchos no están de acuerdo con esta postura porque son empleados, los entendemos pero el bien es común. Hay una empresa en particular a la que le hemos pedido en informe de impacto ambiental hace años y se nos ríen en la cara. Pero tampoco tenemos apoyo del Municipio en nuestra causa, ni del oficialismo ni de la oposición«, agregó.
Por otra parte, el Intendente Marcos Torres anunció además un plazo de ejecución de 10 meses para la apertura de un camino alternativo para el tránsito pesado en el lugar. Lo que, se entiende, resolvería gran parte del eterno litigio, pero en este sentido, la preocupación de los vecinos pasa por la preservación de la fauna.
«Dicen que harán un camino alternativo pero no creemos que el desmonte que hagan sea insignificante como dijeron. Lo que sucede es que nadie nos escucha, nos sentimos solos y lo que pedimos es que nos inviten al Concejo, que nos sentemos a hablar «No queremos que se decrete sobre los derechos que como vecinos ya hemos adquirido», sostienen.
