Desde RESUMEN nos acercamos a la dependencia de PAMI local, donde pudimos comprobar la veracidad de la información. El encargado manifestó tener prohibido dar declaraciones a la prensa, pudimos observar las cuatro computadoras de recepción apagadas.
El área Técnico Operativa del organismo solicitaba a todo el personal del PAMI apagar las computadoras para iniciar lo que se entiende como un formateo de gran escala, el pasado lunes. El medio nacional Clarín, pudo acceder al mensaje. Como se dijo, el organismo tiene unos 14.000 empleados, la mayoría de los cuales trabajan en alguna de las 138 agencias con presencia en todo el país, nucleadas, como se dijo, en UGL, que responden, a su vez al PAMI central. Harán un formateo a gran escala. Hay quienes dicen que la restauración total llevará semanas. Otros, meses.
Desde el organismo -la mayor obra social del país, con cinco millones de afiliados- intentan transmitir tranquilidad a través de mensajes cortos, aseverativos. Entre los compartidos con este medio, siempre por escrito, están que el hackeo “fue mitigado”, que “no hay amenaza alguna de los datos de los afiliados”, que la atención (turnos, entrega de medicación en farmacias) funcionan “con normalidad”.
Además, que los pagos “están garantizados”. Que las licitaciones seguirán los “circuitos de compras normales, publicados en el Boletín Oficial”. Que ya hicieron la denuncia “ante la UFI PAMI”.
Fuentes: Clarín y Resumen