Romina Biagioli hizo su debut en los Juegos Olímpicos de Tokio en la prueba de triatlón, culminó en la posición número 33 de la clasificación general, convirtiéndose en la segunda triatleta argentina que logró culminar la prueba.
La cordobesa hace poco más de un mes tuvo una dura caída durante una competencia en Portugal, donde cae de su bicicleta contra una valla de contención, que le provoco la fractura de una costilla y la fisura de otra del lado izquierdo.
Romina, en el Preolímpico de México, en donde era la última chance de lograr la clasificación y con la lesión a cuesta, consiguió clasificar a Tokio, que se convertía así en su primera participación olímpica.
Biagioli superó los 1500 metros de natación en el puesto 41, con un tiempo de 20:09. Luego, afrontó los 40 kilómetros de ciclismo y escaló hasta el puesto 27 (acumulado de 1:27:36), para terminar en el pedestrismo, en donde tuvo que superar problemas físicos, que la llevó a retrasarse al puesto 33, con un tiempo de 2 horas 7 minutos y 42 segundos.
«Estoy feliz de la vida, lamentablemente no quedo conforme con mi parte de pedestrismo, sufrí un calambre en el diafragma relacionado al problema con la costilla. Estuve en duda si parar o seguir, pero decidí continuar y pude correr firme sobre el final». Manifestaba la cordobesa, ni bien terminada la competencia que tuvo lugar en el Parque Marino de Idaiba.
El triatlón fue oficializado en los Juego Olímpico en Sídney 2000, y solo una atleta argentina había logrado completar la prueba, fue Nancy Álvarez en Atenas 2004.