La China Suárez se ha convertido en uno de los focos de la conocida “prensa rosada”. Pese a sus increíbles proyectos como “Terapia Alternativa” y “Linda”, la actriz se ha destacado por sus diversos romances.
“Los gritos en los pasillos, matándose. Estaban demasiado enamorados en ese momento (…) Era mucha la convivencia, era mucha intensidad. Mucho tiempo de novios”, recordó Cris Morena sobre el romance entre la actriz y Nico Riera durante las grabaciones de Casi Ángeles.
Ahora bien, una de sus últimas historias de amor fue con el cantante Lauty Gram. Si bien existieron algunos rumores de separación, la pareja fue captada en Buenos Aires con una actitud muy cariñosa.
“La China estuvo muy mimosa, a los besos y abrazos sin disimulo con Lauty Gram”, contó Diego Esteves en el programa de A la Tarde.
Debido a que lograron fortalecer su romance, la pareja fue a comer al lujoso restaurante “Gardiner”. Sin embargo, un posible encuentro con una pareja arruinó todos los planes. La ex Casi Ángeles habría sido notificada de unos clientes no deseados durante su cena romántica. De acuerdo con A la tarde, la pareja se trataba de Wanda Nara y Mauro Icardi, los protagonistas del WandaGate.
“La actriz pidió la pesca del día: y el cantante, milanesa, con fideos. A La China Suárez le sonó el celular, se le transformó la cara”, aseveró Diego Esteves.
Seguidamente, para no encontrarse con ellos, se comieron sus platos principales (que consistió en la pesca del día para Suárez y milanesa con pasta para el cantante) y se fueron rápido. “Se fueron. Terminaron el plato, pero no pidieron postre”, detalló el comunicador.
Desde otro aspecto, Mauro Icardi y Wanda Nara se habrían enterado del escape de Suárez. Luego de llegar al restaurante, el futbolista se mostró algo contrariado por el pequeño percance.
“28 minutos después llegó Mauro Icardi, con cara de póker, porque sabía que La China ya había estado ahí”, argumentó el periodista sobre la postura de la pareja.
Finalmente, sin que esto los afecte, el “matrimonio” decidió disfrutar de su velada. “Llegan y piden la comida. Wanda pidió ensalada de la huerta y un pescadito. Mauro se comió un buen pedazo de carne, un ojo de bife. Se fueron apenas pasadas la medianoche”, concluyó el periodista.
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