Se cumple hoy exactamente un año del grave siniestro vial que por poco le cuesta la vida a Ignacio Pereyra; este joven de 19 años -18 en ese momento- que mientras se conducía en su motocicleta por Av del Libertador, fue impactado por un taxi. Desde entonces, la de pelea de Nacho es día a día y su causa es hasthag nacional.
Nacho sufrió un fuerte traumatismo cráneo y permaneció durante varios meses peleando por su vida. Un estado de salud con altibajos, cadenas de oración y un día, el alta médica y el tan ansiado regreso a casa.
A un año de esa lucha, y con la fe intacta, Nacho permanece rodeado de los suyos en el calor de su hogar y con la esperanza puesta en un tratamiento de células madres que parece de a poco estar dando sus frutos. «El objetivo sigue puesto en el viaje a México para que el pueda tratarse allí, pero hoy Nacho no está en condiciones de viajar en avión. Mientras tanto este viaje a La Plata es una esperanza para él», contó en su momento Cintia, su mamá, respecto al reciente primer implante de células madres al que fue sometido su hijo en Buenos Aires.
La causa de Nacho trascendió fronteras provinciales y su familia puso en rifa hasta su casa propia para poder reunir el dinero que necesitan para poder tratarlo y que el joven tenga una mejor calidad de vida.
«A un año del pero día de mi vida, hoy decimos que si se puede, que Dios ha estado en cada minuto, que nos da enseñanza día a día y vos hijo me enseñas lo que es realmente luchar por la vida, sos mi orgullo», posteó Cintia, su mamá.
Desde aquí celebramos todos y cada uno de los progresos de Nacho al que algún día queremos ver de pie. ¡Que así sea!