¿Alguien puede imaginarse a Lanata elegido como el mejor periodista en una elección realizada por el noticiero 6,7,8? ¿O a Aníbal Fernández premiado por el Noticiero del 13 como el mejor funcionario? ¿De la Sota destacado por Tiempo Argentino como el mejor opositor? ¿Juan Pablo Feinman recibiendo un premio de Clarín? ¿Difícil no?
Tan difícil parece que uno pueda darlo como el otro recibirlo. Y es que quien crea que el Grupo Clarín miente, no cree en ninguna de sus propuestas, ni en sus premios, ni en los medios que forman parte, ni en nada.
Por eso llama tanto la atención que el pastor Pablo Catania, defensor a ultranza del Gobierno Nacional y enemigo desde las redes sociales del Grupo Clarín, haya aceptado estar entre los postulados para Cordobés del año de la Voz del Interior, medio que pertenece al mencionado grupo. Y que desde la misma red social desde donde dispara contra el Monopolio y apoya al 7D, pida que lo voten para ser destacado por un medio que según los kirchneristas, miente. Si creen que Clarín miente ¿La Voz miente? Y si creen que La Voz miente ¿tanto desean recibir un premio de su parte? He aquí una gran contradicción.
Nadie niega que su lucha por la liberación del arroyo en el Potrerillo de Larreta no sea genuina ni digna de destacar. Aunque paradójicamente sea La Voz del Interior uno de los principales auspiciantes en las exclusivas canchas de golf de Potrerillo.
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