Tanto kirchneristas como schiarettistas esperarán que transcurran las elecciones internas del justicialismo cordobés, el 27 de marzo, para trazar estrategias, aunque desde ambos sectores no vaticinan una fractura que dé lugar a un nuevo bloque provincial con legisladores k. Los duros cuestionamientos del Gobernador Juan Schiaretti al Gobierno nacional por el reparto inequitativo de los fondos enojó a los kirchneristas cordobeses, aunque no lo suficiente como para que se produzca la salida de los legisladores provinciales afines al Frente de Todos y que integran el bloque oficialista de Hacemos por Córdoba.
El silencio fue la estrategia que trazaron tras las duras declaraciones del gobernador el martes pasado, en la apertura de sesiones ordinarias de la Legislatura de Córdoba. Sin embargo, el hermetismo podría tener fecha de vencimiento, por lo que es seguido de cerca por los oficialistas provinciales. Ni Walter Saieg, tampoco Mariana Caserio ni Rodrigo Rufeil emitieron ninguna clase de opinión al respecto del discurso del Gobernador. Saieg, junto con los legisladores Carlos Alesandri y Carlos Presas, fueron los que cuestionaron en diciembre pasado que Oscar González continuara en la Presidencia Provisoria de la Legislatura, y pidieron desde el último tramo de 2021 mayor respaldo y amplitud en el bloque. Este grupo tampoco dejaría este año la bancada oficialista, aunque estaría dispuesto a marcar las diferencias internas.
Aunque no haya armado de un bloque kirchnerista ni intentos de alejamientos a la vista desde la bancada de Hacemos por Córdoba, sí se especula que las diferencias se harán sentir en el recinto legislativo. Una de las primeras sería el no acompañamiento a un proyecto de adhesión a una propuesta de los diputados nacionales schiarettistas para reclamar un boleto federal. “Así como no se acompañó la ley de juego online, se podrán dar este año estas mismas situaciones”, confió un legislador a La Voz del Interior.