En dos semanas abre sus puertas el gimnasio del Hospital Illia que fue difundido hace solo 4 meses por este medio como un sueño por cumplir, y ya es una realidad. Si bien en sus comienzos va a contener a una pequeña porción de pacientes, a medida que vaya avanzando se irán agregando días y personal.
Por el momento funcionará los martes alrededor de las 13:30 hs: “Vamos a trabajar con un equipo interdisciplinario de nutricionistas, psicólogos, cardiólogos y yo como médico deportólogo; y vamos a recibir todo tipo de pacientes; primero aquellos que son sedentarios -la mayor problemática de la actualidad-, y después vamos a continuar con el sindrome metabólico y con los problemas cardíacos”, señaló el vicedirector del nosocomio y alma mater del proyecto, Carlos Delera.
El espacio está colindante a la sala de fisioterapia del hospital y tiene en su interior toda la aparatología necesaria para tratar distintas patologías. Una cinta de alto rendimiento, un elíptico, distintos tipos de bicicletas, un multigimnasio, etc son los aparatos que fueron donados por diferentes ONGs y organizaciones tanto de la ciudad como de la provincia.
“Más que el tipo de elementos que tenemos, lo importante es que vamos a contar con un trabajo más sistemático y coordinado para que el alumno no repita cada martes el mismo ejercicio, sino que todo el tiempo haga algo distinto”, advirtió quien estará a cargo del funcionamiento del gimnasio, el profesor Guillermo Vaca.
Destacado y comprometido
Es importante resaltar que el docente llegó al hospital de la mano de Delera, a quien conoció en el gimnasio de rehabilitación cardiovascular y enfermedades metabólicas del Hospital Córdoba. Vaca es un reconocido docente de la Fundación Quality de Profesorado de Eduación Física (el más importante que tiene Córdoba en este momento) en el área de Fisiología del Ejercicio y Biomecánica Aplicada.
“Queremos hacer en Alta Gracia lo que se hace en Córdoba pero de un punto de vista más profesional y más técnico generando una base de datos para que el día de mañana el médico pueda ver todo el progreso y la evolución que han tenido en una rehabilitación cardiovascular, biomecánica, etc un paciente; y tener evaluaciones continuas cada 15 ó 20 días de lo que es la evolución fisiológica y anatómica del paciente”, señaló el profesor; y agregó: “Nosotros no podemos hablar de paciente, de alumno debemos hablar de personas totalmente funcionales a un cuerpo, y el cuerpo está adaptado a un sistema cardiovascular, respiratorio de apoyo, hormonal, etc; es decir, esto no se trata de solo una rehabilitación e irse; se trata de que sea funcional para la vida que tiene que llevar ese paciente», finalizó quien estará a cargo de las clases.
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