Diego Bolzoni llegó a nuestro país cuando tenía 11 años desde su Italia natal. Si bien sus primeros años los vivió en provincia de Buenos Aires, al poco tiempo llegó a Alta Gracia junto al resto de su familia. Su apellido es reconocido por trayectoria y trabajo a lo largo de los años y hoy, es palabra autorizada para hablar del Círculo Italiano. Por ello fuimos a buscarlo, para conocer el pensamiento de alguien que siente como propia la institución.
Su apellido figura entre los fundadores del Círculo…
Claro, mi papá Lucio junto a otros compatriotas entre los que estaban Romeo Mazzini (abuelo de Enio) y otros como Montecchiari, Badesso, Tartarini y varios más fueron los que arrancaron. Se inició como una necesidad que tenían todos estos inmigrantes a agruparse, a darse fuerzas entre ellos en un país que los había acogido pero que les era ajeno.
Y hoy, ¿que piensa de la actual situación del Círculo?
Siento que se desvirtúa todo lo que se hizo en los inicios y durante muchos años. Todo el trabajo, todo el esfuerzo puesto durante tanto tiempo para hacer una institución grande e importante.
¿Tan grande fue?
Fue una de las más importantes de la ciudad. Competía con Colón para ver quién se destacaba más a la hora de los corsos o los encuentros sociales. Se hacían fiestas grandes, casamientos, bailes, cenas, había cuerpos de baile que hacían giras, se hacían carrozas en los carnavales, siempre con una vida social que incluso iba más allá de la colectividad. Y todo hecho con sacrificio y aportes de los socios.
¿Y entonces? ¿Por qué se llega a esta situación actual?
Primero que nada, porque ya no hay italianos. Hay hijos, hay descendientes, pero no es lo mismo. No es el mismo amor que se le pone a una institución. Luego, hay otros factores que también afectan, pero a todas las instituciones. Antes, todos trabajábamos gratis por un club, ahora, si hay que hacer un trabajo, hay que pagarlo, casi nadie pone tiempo ni esfuerzo gratis. No hay gente que trabaje por amor a un club y eso los debilita de a poco.
El club no ofrece mucho, tampoco…
Es cierto, hoy querés hacer socios y te preguntan qué te da el club, pero nadie viene (como era antes) a ver el panorama y preguntar qué podía hacer por el club. Eso también es cierto. Acá en el Círculo hubo mucho tiempo en que trabajamos gratis, por el club, incluso en Colectividades, sin pedir nada.
A muchos no les cae nada bien la ingerencia externa en la vida del club, pero tampoco es bueno una administración sin papeles…
Por supuesto. Cada uno tiene que asumir sus responsabilidades. Acá hubo una conducción que estuvo 10 o 12 años sin hacer una asamblea ni presentar un balance.
¿Y hay solución a todo esto?
Yo la tengo. El otro día ha arrearon personas a hacerse socios, al mejor estilo de los punteros políticos. Desaparece la antigüedad y todos estamos en iguales condiciones. Entonces, agarremos a todos los socios nuevos que se hayan hecho y que paguen los dos años que por estatuto debieran tener de antigüedad para elegir o ser elegidos. Con ese dinero hay para sanear arcas, y a la vez te asegurás que no vengan, voten y no caigan nunca más por el club luego que eligieron a un presidente.
Habría tres listas posibles, ¿qué opina de ésto?
odo esto se da en medio de muchos rumores que involucran a las últimas autoridades, o a los que se postularían como posibles directivos. Todo eso son rumores, a mí, como viejo socio y conocedor de la institución me cabe una sola lectura: que faltan cuatro meses para Colectividades y todos quieren estar prendidos porque es un gran negocio.
¿Pudo hablar con Felix Moschella, el último presidente?
No, el otro día llegó a dejar unos papeles y se fue. También él es uno de los responsables para que se haya llegado a esta situación. Acá se llega entre otras cosas por no presentar balances, no hacer asambleas y no tener los libros en orden.
¿Cómo ve que se meta la política en esto?
Llenan espacios que dejan las instituciones. No digo que acá se haya quedado nadie con lo que no era suyo, digo que no se ha administrado correctamente. El Estado ayuda mucho a los clubes, pero para eso, los clubes tienen que tener su papelería en regla, sus libros en orden y su situación regularizada. Y en las condiciones que está el Círculo ni siquiera puede recibir un préstamo ni un subsidio oficial.
Llegamos a la conclusión que la falta de participación…
Es la madre de todos estos males, claro está. En el Círculo, cuando hubo mucha gente trabajando, por ahí nos peleábamos porque uno era fascista, otro comunista, otro… pero luego de las discusiones tirábamos todos para el mismo lado.
¿Le ve salida cierta a ésto?
La verdad, que se me hace difícil ver una salida a esta situación. Fueron muchos años de malos manejos, es mucha la gente que se alejó y nadie conoce ni por cerca la realidad actual del club en cuanto a los números, activos y pasivos. Además, habrá que ver la situación de la gente que ha estado trabajando en la Secretaría todo este tiempo. Si no sigue, ¿se irá a ir así nomás o significará un juicio para el club? No se, son muchas las cosas que me hacen pensar que es muy complicado ver algo al final del túnel.
Me pongo a pensar qué cosas le pasan por la cabeza a alguien como usted, fundador del Círculo…
Y.. es una mezcla de bronca, de tristeza y de impotencia. Uno como socio (y esto hay que decirlo también), por distintos motivos también terminó por no interesarse en la institución y dejar todo en manos de los pocos que se hicieron cargo. Porque la última comisión directiva también es una realidad que se hizo cargo porque no había más nadie para asumir ni para integrar la conducción. No hubo gente que se sumara.
Me hace ruido que no estén ni los libros del club…
No, los libros están. Los tiene Moschella, me lo dijo Caggiano. Pasó que no los presentaron cuando se los requirió Personas Jurídicas, pero están.
Me quedé pensando en lo que dijo sobre Colectividades…
Los primeros años todos trabajábamos por el club, sin cobrar un peso, todo para el Círculo. Luego, cuando algunos vieron que era negocio, casi que privatizaron la participación en Colectividades y la realidad es que nunca más se rindieron cuentas de eso.
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