
María Romero vive en calle Martín Pescador de barrio La Perla desde hace 3 años. Su vivienda, donde se puede observar un minucioso trabajo de limpieza tanto dentro como fuera de la casa, está a pocos metros de la zona agreste del barrio; sin embargo la familia se encarga de cortar pasto, barrer, blanquear y llevar adelante todas las acciones necesarias que eviten la presencia de alimañas.
A pesar de todo ello, tanto la mujer -que convive con su hijo, nieta y bisnieta- como algunos vecinos del sector, están luchando desde hace varios días con la inesperada presencia de vinchucas, que llegan cuando cae la tarde; y de a decenas. “Tenemos mucho cuidado, porque encima en nuestra casa hay un bebé; pero es sorprendente ver como llegan todos los días en grandes cantidades y buscan la luz. Hemos atrapado algunas vivas para mostrárselas a quien venga a supervisar esta problemática que nos preocupa muchísimo, y hemos matado cantidades”, afirma María mientras muestra un frasco con seis de los insectos encargados de transmitir el mal de Chagas en la Argentina.
“Es la primera vez que vemos tantas”
La familia manifiesta sentir preocupación por la cantidad de vinchucas, y advierte que, tiempo atrás, se veían algunas pero no “tan grandes y en multitud”, aseguran. Es importante destacar que el parasito Trypanosoma cruzi (conocido en Argentina como vinchuca) es el encargado de transmitir el mal de Chagas; enfermedad que afecta diversos órganos como el corazón, el aparato digestivo y el sistema nervioso. Según el Ministerio de Salud de la Nación, en la actualidad hay aproximadamente 1.500.000 infectados con el mal, y ya dejó de ser una “enfermedad de campo”, como lo era años anteriores debido a que, por diversos factores, el insecto arribó a zonas urbanas. Especialistas del Hospital Tránsito Cáceres de Allende, manifestaron a Resumen, en tanto, que “la problemática corresponde a Salud Pública. Es necesario, aseguraron, implementar acciones municipales, que incluyan la fumigación, el control de la población afectada por la proliferación de la vinchuca, y el blanqueo de las paredes de las distintas viviendas, entre otras medidas.
Desde el área de Salud de la Municipalidad, en tanto, afirmaron a este medio que no se han recibido consultas relacionadas a a picadura de vinchucas hasta el momento: “Si el área de Ambiente solicita la intervención porque valoran que hay personas en riesgo asistimos al lugar. Es muy frecuente que en esta época aparezcan alimañas e insectos que en invierno no se veían. La higiene de los domicilios particulares es fundamental para que se mantengan alejados”, señaló el secretario de la dependencia, Martín Cugno.
Desde la Secretaría General y de Ambiente, en tanto, coincidieron en que hasta el momento no hay denuncias relativas a este tema, y afirmaron que seguramente el personal afectado a Ambiente se llegará al lugar “para valorar si es necesario un operativo connjunto con Salud”, afirmó el titular del área, Roberto Urreta.
“Nos sentimos abandonados”
María, agrega además, que en el barrio -sobre todo en algunos sectores- “nos sentimos abandonados. No hay prácticamente servicios, la Policía no llega al fondo, la luz es escasa. Tenemos que pelear con este tipo de cosas y encima con la inseguridad. Parece que barrio La Perla no fuera parte de la ciudad”, asegura. Por otra parte su hijo comenta que un vecino, que vive a 150 metros aproximadamente de su casa, descubrió cuatro vinchucas mientras dormía: “Su hijo vio cuatro pegadas en el techo. A nosotros, gracias a Dios, no nos han ingresado dentro de la casa, pero es porque tomamos muchísimas precauciones. Mantenemos todo limpio y cerrado”, afirmó.
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