El Cuartel de Bomberos de Villas Ciudad de América es uno de los más legendarios de la región y, en la actualidad, quienes lo sostienen siguen siendo los portadores de un apellido más que representativo: Los Colombati.
Maria Alicia es la Presidenta de la Comisión Directiva del Cuerpo de Bomberos y también hija de Don Colombati, fundador del Cuartel y quién comandó la Comuna de Villas Ciudad de América por casi 30 años. Su hijo, Nahuel, es el Jefe del Cuartel y hace poco reclutaron a José «El Oso» Colombati, quien se jubiló de Bomberos de Alta Gracia tras 35 años de servicio y hoy es asesor de su propia familia en el cuartel vecino.
Así es, Nahuel está acompañado por su madre y por su tío pero también por unos 40 bomberos que brindan tiempo y dedicación a su comunidad todos los días.
«Acá somos familias, todos somos un equipo y nos estamos capacitando todo el tiempo», explicó Nahuel en diálogo con RESUMEN, a la vez que recordó a su abuelo- quien falleció en el 2024- y le entregó a su pueblo más de 40 años de servicio.
«Lo que mejor nos llevamos de mí abuelo es cómo defendió el sistema, esa garra que le ponía. Es lo más valioso y él siempre está presente», dijo el joven Bombero.
Por su parte, José Colombati- tío de Nahuel- habló se fue presente en Villas Ciudad de América y su rol dentro del cuartel que fundó su padre.
«Es un orgullo continuar en familia y seguir el legado que dejó papá. Hoy soy parte del cuerpo asesor y hasta que sirva (risas), la verdad es que somos un gran equipo y estamos para eso, para brindarnos hacía la sociedad».
Además del amplio número de Bomberos Voluntarios, el cuartel cuenta con aspirantes y cadetes. «Recientemente adquirimos un set de herramientas para rescate en accidentologia vial de tránsito pesado. Lo que más nos motiva es a mejorar. Nos motiva solucionar las falencias que quizás hubo en el pasado y quizás las estamos solucionando ahora».
Respecto a cómo define la labor de un Bombero, Nahuel expresó: «Es un trabajo sacrificado y pasional. 100% vocación de Servicio. Más allá de que es voluntariado, nadie percibe nada. Hoy la única recompensa que tenemos como bomberos voluntarios, más allá de los aportes para su retiro, después de 20 o 25 años de servicio es una obra social y un seguro, es pura vacación pero es súper satisfactoria», culminó.
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