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11 años sin Verónica: un femicidio evitable y sin Justicia

Se cumplen hoy 11 años del femicidio de Verónica Presson, la joven mamá de B° Tiro Federal que encontró la muerte en manos de Fernando Olmedo, su ex pareja, con quien tenía multiples denuncias por violencia.

El caso de Verónica pareciera ser la crónica de una muerte anunciada. A quien el Estado ni la Justicia protegieron. Tenia miedo y sus familiares y amigos dieron fe de ello. Sin embargo, la perimetral no impidió que su verdugo fuera a su casa y la estrangulara.

Fue un día como hoy del año 2010. El cuerpo de Verónica fue hallado en el patio de su casa detrás de la terminal de ómnibus y, su femicida, permaneció prófugo durante varios días hasta que finalmente fue encontrado muerto camino a la Paisanita. Se había ahorcado.

Era un lunes soleado tal  como hoy.  Verónica había quedado en almorzar con su novio en Villa Montenegro,  pero nunca llegó. Él hombre tenía motivos para preocuparse ya que tampoco respondía su celular, por lo que decidió ir a su casa. Fue cuando se encontró con la lamentable escena y con el menor de ellos hijos en el lugar; este, por fortuna, no se había percatado del homicidio de su madre.

Para la nueva pareja de Verónica no había dudas, el autor había sido Olmedo, la había sorprendido y tras propinarle un golpe certero le enlazó el cuello con una soga y allí la arrastró. El rostro de su novia también estaba desfigurado. «Hubo mucha saña», relató el hombre en ese entonces.

Cuando mataron a Verónica el homicidio vinculado a la cuestión de género aún no formaba parte del Código Penal  por lo aun no se hablaba de femicidio. Sin embargo, fue este seguramente el más claro ejemplo de un crimen en donde la víctima había quedado despojada a la desprotección total y en el que el victimario creía tener posesión de ella. Fue su verdugo durante años y ninguna de las medidas de la Justicia impidieron que la matara.

Olmedo se mató con la misma soga con que mató a Verónica.

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