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35 años trabajando para el Museo de la Estancia Jesuítica

Cuatro mujeres profesionales entregan su vida a este espacio cultural y lo consideran "su casa": se trata de Marta Troncoso, Vilma Brondo, Adriana Martínez y Nancy Torres.

El miércoles 1° de Junio, cuatro mujeres trabajadoras, integrantes del equipo del Museo Nacional Estancia Jesuítica de Alta Gracia y Casa del Virrey Liniers, cumplen 35 años de servicio. Sus nombres son; Marta Troncoso, Adriana Martínez, Vilma Brondo y Nancy Torres quienes desempeñan tareas fundamentales dentro de los diferentes proyectos en los que trabaja la institución.

Estas profesionales, han entregado gran parte de su vida, al servicio de este centro cultural. Han trabajado en diferentes gestiones y han sido parte de diversos procesos de trasformación dentro de la institución.

Reconocimiento

Tomás Ezequiel Bondone, director de la Estancia Jesuítica, se refirió al aniversario de las trabajadoras y expresó: “Considero que se constituye en un capital de inmenso valor la posibilidad que las instituciones culturales cuenten con equipos experimentados. Por ello, los saberes especializados que cada una de estas trabajadoras atesoran tras sus 35 años de trabajo comprometido, suman calidad a la gestión de nuestro museo, reconocido como un referente profesional a nivel nacional».

Desde RESUMEN dialogamos con Brondo y Troncoso, sobre cómo entraron a trabajar allí, sus vivencias, los cambios del museo en tantos años y su crecimiento como profesionales.

vilma y marta museo de la estancia - Diario Resumen de la región

Por su parte, Troncoso relató que ingresaron por concurso 13 personas, ese 1° de junio de 1987. De las cuales, quedan las cuatro mencionadas anteriormente. La profesional se desempeñó sólo en el museo y se especializó en el mantenimiento de las colecciones y documentación -lo que no se ve, pero hay que cuidar y proteger, según las palabras de Brondo-. «Cada vez que entro al museo, siento que entro a mi casa» dijo emocionada.

La profesional detalló que la entidad tuvo tres momentos, el primero cuando recién arrancaba, «muy estructurado, muy blanco«, una segunda con una articulación con otros museos en la cual se trajeron muestras que llenaron de color el sitio y esta tercera etapa, cuando la institución busca una apertura a la sociedad.

Brondo, por su lado, también estudió Historia y por eso se encarga de la biblioteca y también es profesora de secundaria.

Sobre si alguna vez vivieron alguna experiencia «del más alla» narraron que ellas personalmente no, pero trabajadores y visitantes coinciden en haber visto a una persona -por la vestimenta clara, habría sido un negro- en el sector de las escaleras internas.

Finalamente, ambas manifestaron su admiración por sus otras dos compañeras, Martínez y Torres, por la directora Noemí Lozada de Solla -la primera mujer directora de un museo nacional-, por Mónica Risnicoff de Gorgas y por Tomás Bondone, actual director del espacio.

Roles

Marta Troncoso, es encargada del área de Gestión de Colecciones, su rol está vinculado al resguardo de colecciones, profesión en la que se formó arduamente desde muy joven.
Adriana Martínez, ha desempeñado diferente roles, en este momento se encuentra a cargo de la Coordinación General, encargándose de la logística interna de los proyectos que lleva adelante el museo, siendo un nexo entre trabajadores y la gestión.
Vilma Brondo es encargada de la biblioteca y tiene un rol activo asesorando a sus compañeros y compañeras en aspectos referidos a la historia.
Nancy Torres, cumple tareas asociadas al ámbito del mantenimiento y conservación del patrimonio.

 

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