En estos días la ciudad amaneció empapelada con cartelería que parece tener un objetivo muy concreto: cuidar tanto la seguridad vial como la tranquilidad de los vecinos. Con un diseño de alto impacto y un mensaje claro, el gobierno local busca interpelar a los vecinos en un tema fundamental y que no puede depender solo de los controles o del cobro de multas, sino que demanda también madurez vecinal para mantener un valor tan preciado que solía caracterizar a Alta Gracia: La tranquilidad y la buena convivencia.
Con frases como “Si no usás casco, no usás la cabeza”, “Si tu caño de escape hace ruido no te da la nafta” y “Tu playlist está buena, el volumen no”; la nueva campaña llama a cuidar la propia vida y también el buen trato con los demás. ¿Funcionará?
Quizá sea oportuno recordar, en este y en tantos otros temas, aquella frase que solía enseñarse en las escuelas sobre que “la libertad de uno termina donde empieza la del otro”. O mejor aún: En una época donde tanto se habla de la libertad, y más allá de que necesitemos leyes y controles, quizá sea momento de recordar que las mejores ciudades se hacen no solo con multas, sino con la voluntad de su gente.
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