Se realizó una nueva reunión el pasado miércoles, con la participación de funcionarios y personal policial, para que vecinos de barrio Pellegrini plantearan sus preocupaciones sobre la ola de inseguridad que azota en la zona.
Son varios hechos, distintas viviendas y el reclamo es casi único: “Estamos cansados; roban, rompen, están libres, la Policía argumenta que no puede hacer nada y que es la Justicia quien debe tomar cartas en el asunto”, afirman. Los dos últimos hechos en el lugar sucedieron el sábado y el lunes, sin embargo, aún no se ha logrado recuperar lo robado; a pesar de que hay vecinos que afirman haber aportado nombre, y hasta dirección de los delincuentes, además de la ubicación donde estarían los elementos.
“Entraron a robar cuatro veces en los últimos 20 días. La mayoría de las veces no estábamos en casa, porque quienes entran (vecinos ya identificados de barrio Sabattini) controlan los movimientos, excepto la última vez, que mi mamá se había quedado dentro y se enfrentó cara a cara con el delincuente”, sostiene Marcos, vecino de Valencia al 500 mediante un relato que mezcla indignación y resignación: “Hice las denuncias, brindé todos los datos, hasta fui a hablar en Fiscalía, donde nunca logré dar con el Fiscal y jamás logramos recuperar lo robado, ni que le dieran al tema la importancia que tiene”, continúa.
Un recorrido por la casa, da cuenta de los daños en puertas y ventanas, muebles nuevos que reemplazan los robados y espacios vacíos donde alguna vez había elementos del hogar: “Un revólver, una carabina, tres rifles de aire comprimido, un plasma, herramientas, una cámara de fotos, una notbook, ropa, etc, son algunas de las cosas que pudieron llevarse: “Lo peor es que el delincuente pasa todos los días frente a mi casa, lo detuvieron y luego lo dejaron libre porque supuestamente no encontraron pruebas. Sabemos que hay dos bandas, todos lo sabemos, menos la Justicia y la Policía”, agrega.
Más casos
María, una vecina de calle Mansilla, no escapó a la seguidilla de hechos delictivos y este lunes fue víctima de un robo a plena luz del día. Los malvivientes literalmente “le desvalijaron” la vivienda, preocupante hecho, cuando a pocos metros estaba un policía custodiando a la familia de calle Valencia.
Foto: Atrincherados: de esta manera refuerzan la puerta que da al patio los vecinos de calle Valencia. Rompieron todos los vidrios en el último robo.
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