Los Años Dorados es sinónimo de excelencia en el trabajo junto a los adultos mayores en nuestra ciudad. En la noche del sábado, inauguró una nueva dependencia que cuenta con el confort, la comodidad y la calidad que exigen y necesitan quienes se alojan en sus instalaciones.
Se trata de una enorme casona con todos los servicios y comodidades, dotada de amplios ambientes y espacios comunes para la atención de hasta 17 personas que contarán con las mejores instalaciones que pueden encontrarse en la ciudad.
Todo esto combinado con una atención de excelencia brindada por los profesionales que día a día atienden a los residentes.
Su dueña, Sonia Travaíni, cuenta de las prestaciones de la residencia: «La intención es abrir un instituto de rehabilitación neurológica y física para personas que tengan discapacidad o problemas neurológicos, con un nuevo concepto. La casa cuenta con hidroterapia con una pileta climatizada, cerrada, donde los profesionales -fisiatras y el equipo de psiconeurología- podrán trabajar con los pacientes».
Travaíni, quien ha sumado a su proyecto a su esposo Mario Quinteros, sigue explicando que «es a partir de hoy el primer lugar en incursionar en este tema. En Córdoba los institutos son solamente de rehabilitación, no tienen internación como nosotros. Además la intención es que funcione a puertas abiertas, es decir que es para todos aquellos pacientes adultos mayores que necesiten rehabilitarse que estén en su casa o en otro instituto. Tendrán la rehabilitación que necesiten con nuestro equipo de profesionales».
En «Los Años Dorados» trabajan alrededor de doce profesionales entre los médicos, la neuróloga, cuatro psiconeurólogas, un fisiatra y dos fisioterapeutas.
La nueva casa inaugurada tiene dos plantas, y en cada planta es una casa completa, con dormitorios (algunos en suite), cocina, living comedor, balcón, porche. El paciente no tiene que trasladarse para vivir en el lugar. En la planta baja habrá pacientes para rehabilitar y en la planta alta funcionará como un pequeño hotel.
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