El procedimiento es el mismo desde el inicio. Ni bien se reporta la presencia de un vehículo abandonado en algún punto de la ciudad, desde la Secretaría de Transporte proceden a intimar a su propietario para que éste actúe y retire el rodado del lugar. De no hacerlo, personal del Municipio lo retira y lo deposita en el Corralón. Y, en esta instancia, si el infractor desea recuperarlo, debe pagar una multa.
«Al momento tenemos unos 20 autos intimados y en estos últimos años se han sacado unos 300 vehículos de las calles de la ciudad», aseguró Roberto Urreta, Secretario de Ambiente y Transporte del Municipio a RESUMEN.
Cabe destacar que muchos de estos rodados no tenían dueño y estaban desechados como basura, pero otros no. «Es importante que la gente sepa que si tiene un auto lo debe tener en algún garage. Estamos sacando la basura que hay en la calle», culminó Urreta.
Comentarios: