¿Cómo estás?, porque se te nota tranquilo.
Estoy tranquilo. Lo que pasa es que si te ponés loco, es peor. Por eso me vine acá, a casa, con mi gente. La ansiedad por jugar se tolera más en familia. Además, siempre vienen amigos a hacerte el aguante.
¿Qué te han dicho los médicos?
Que la operación salió bien, que hay que respetar los tiempos de recuperación. El postoperatorio lleva entre cinco y seis semanas, así que asumo que tengo que estar parado por mi bien, y no apurar los tiempos.
¿Hasta cuándo te quedás en Anisacate?
Esta semana ya me estoy volviendo a Buenos Aires. Me dieron permiso unos días, pero la idea es volver allá para comenzar a pisar, a ganar en confianza con el pie y empezar a hacer los primeros movimientos.
Y ganar en confianza también de la cabeza, para que no quede el temor lógico luego de una operación.
Sí, claro. De la cabeza es de donde tengo que estar mejor porque tengo que tenerla despejada para volver bien cuando pueda hacerlo.
Vestiste la camiseta de Boca unos minutos este verano, ¿qué sensaciones tuviste?
Muchísimas. Jugar en Boca es distinto a todo. Sentís que la gente te apoya, te alienta en todo momento. También te exige mucho, pero ahí está lo lindo, en devolverle a la gente ese apoyo. Es algo genial sentir ese aliento.
¿Cómo evaluás tu paso por Colón?
Muy positivo. Me sirvió de mucho, además me hice conocer más todavía y encima conseguimos el ascenso.
Cristian Pavón completará en Capital Federal su recuperación y se estima que estará volviendo a las canchas en su plenitud física en dos meses.
La lesión
Cuando se llevaban disputados pocos minutos del primer clásico del año, Cristian Pavón recibió dos faltas groseras desde atrás de Leonel Vangionni.
El diagnóstico fue preciso: fractura del quinto metatarsiano del pie izquierdo. Fue operado la semana pasada por el médico de Boca Juniors.
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